Un clásico, si es que no hay aperitivo que más nos guste que unas buenas croquetas y desde luego han de ser caseras!
Las croquetas las hay de toooodos los tipos imaginables, hoy os pondré dos recetas que he elaborado con la termolidl pero que se hace de la misma manera de forma tradicional. Lo bueno del robot de cocina es que la bechamel te queda perfecta en tan solo dos minutos!! Nosotros y nuestros brazos y cucharas de madera en manooo ya no sufrirán más!!
INGREDIENTES:
30gr. de jamón serrano.
100 gr. de pechuga de pollo.
1 huevo duro.
25 gr. de aceite de oliva.
50 gr. de mantequilla.
15 gr. de cebolla.( aproximadamente es media cebolla )
35 gr. de harina.
400 gr. de leche.
PREPARACIÓN EN EL ROBOT:
Picar el jamón con dos golpes de turbo, retirarlo del vaso del robot y reservar.
Poner el pollo en el vaso, programar 6 segundos velocidad 5 y reservar.Después picar el huevo duro 3 segundos velocidad 3 y reservar.
Poner en el vaso el aceite, la mantequilla y la cebolla partida en trozos y programar 5 minutos, temperatura SF ( varoma en termomix ) velocidad 3.
A continuación añadirle la harina y programar 1 minuto, 100º velocidad 2, incorporamos la leche y mezclamos diez segundos velocidad 6 y añadimos el pollo y el jamón y programamos 7 minutos velocidad 4 temperatura SF. Por último añadimos el huevo y la sal y dejamos enfriar en una fuente a temperatura ambiente y después en la nevera y si es de un día para otro mejor.
Si hacemos la bechamel de FORMA TRADICIONAL:
En mi casa siempre la hemos hecho de la siguiente manera, en una sartén bastante grande añadimos una cucharada de aceite de oliva, bien colmada. En cuanto está caliente añadimos dos cucharadas de harina o tres…dependiendo de la cantidad que queramos e inmediatamente vamos añadiendo la leche, poquito a poco mientras removemos, en círculos, de tal manera que no salgan grumos.
En cuanto empieza a coger consistencia añadimos un poquito más de leche, volvemos a remover despacio, desligando bien todo, y al ver que empieza a espesar de nuevo un poquito más de leche…así casi tres cuartos de litro de leche. Ya os digo que las medidas de harina y leche son un poco a “ojo de buen cubero” según la consistencia y la cantidad que queráis.
Por otro lado tengo el jamón cortadito en trozos y si se quiere el pollo o el huevo duro.
En el último giro cuando ya tenemos toda la cantidad de bechamel que queremos, ésta no ha de quedarnos demasiado líquida pues las croquetas se desharían, más bien tirando a espesa pero no os preocupéis si la veis como crema pues en la nevera aún espesará más, añadimos el jamón y los ingredientes que queramos para integrarlos en la bechamel, a la vez que la sal. Removemos y dejamos enfriar al menos cinco horas o mejor aún si es de un día para otro, en la nevera.
CUANDO YA TENEMOS LA BECHAMEL LISTA EN LA NEVERA, procederemos a hacer las croquetas:
dispondremos de un plato con pan rallado ( si queréis darle un toque hacerlo con pan rallado con ajo y perejil, quedan muy sabrosas ) en otro plato dos huevos batidos y si la bechamel tiene la consistencia un tanto ligera en otro plato pondremos harina para “sujetar” mejor la croqueta. Aunque mi madre siempre las ha rebozado dos veces, es decir las pasaba por huevo, pan rallado y de nuevo huevo y pan rallado y nunca se rompían. Pero sino pues con las manos hacéis una bola ovalada y las pasáis por harina, después por huevo y por último por pan rallado.
Cuando tenemos todas listas a freír en una sarten con abundante aceite de oliva bien calentito! Vuelta y vuelta pues enseguida cogen color! Retirarlas en un plato con papel de cocina absorbente por debajo para que suelte el aceite restante, ponerlas a continuación en otro plato y después a disfrutar de las croquetas…ups….no pongo foto del resultado final por que no llegué a tiempo de hacerlas la foto!






